IMPECABLE ES ROCíO CRUSSET EN ALPARGATAS Y PANTALóN DE VESTIR EN SEVILLA

Rocío Crusset está en Sevilla como tantos otros rostros conocidos. Durante una semana, siempre en abril y siempre bajo los efectos del albero, la capital Hispalense se convierte en el epicentro de la fiesta, el rebujito y la moda sureña. Sin embargo, lo que sucede con el vestido de flamenca se parece mucho, demasiado, al inevitable hartazgo que uno siente tras más 10 horas escuchando sevillanas, que nadie dice que no sean ni divertidas, ni festivas, ni levanten el ánimo de un muerto, pero con un par es más que suficiente.

Sí, este fin de semana –y lo que nos queda– hemos visto muchos trajes de flamenca, pero al final, quizá por obra del mencionado hartazgo, hemos acabado analizando y deseando aquellos looks igual de elegantes y sureños pero carentes de volantes y lunares. Los conjuntos que han lucido Cayetana Rivera o Victoria Federica son solo dos perfectas muestras de lo que buscábamos y terminamos encontrando, y Rocío Crusset es el tercer caso que confirma que cuando de rebujito te cansas nada mejor que un buen vaso de agua.

La modelo ha acompañado a su padre, el periodista Carlos Herrera, a la ineludible cita de éste con La Maestranza durante el primer sábado de feria, y para la ocasión ha confiado en una serie de básicos que aunque carentes del colorido cuentan con otro fiel aliado en materia de estilo: la elegancia de lo clásico.

Rocío ha combinado con pantalón de vestir de un tejido similar al lino con un detalle de sobrefalda en un lateral, un top marrón chocolate de escote halter y unas alpargatas de cuña. En cuanto a estas últimas, son sin duda los zapatos que el 90% de las asistentes a la feria escoge por evidentes motivos de comodidad (y estilo), pero en el caso de Rocío lucen como unos elegantes y altísimos salones.

Sencilla, muy elegante y en las antípodas de la moda flamenca, pero sin duda una de las asistentes a La Feria mejor vestidas. Al menos de lo que llevamos de feria, al menos de este fin de semana.