LUKE EVANS LE DECLARA SU AMOR A MADRID: "VIVO EN MALASAñA PORQUE LOS ESPAñOLES TENéIS LA FORMA DE VIDA CORRECTA"

El actor Luke Evans (15 de abril de 1979, Pontypool, Gales)destila naturalidad. Y en ese terreno está cómodo. Y en España también, por cierto, y mucho. Después de un profundo proceso de aceptación de su cuerpo y limitaciones, asume que ya ha cumplido los 45 años y que cada vez le cuesta más estar en la excelente forma que luce aquí. Sin presiones ni ataduras, con la misma tranquilidad con la que asume el arcaico debate de un actor abiertamente gay interpretando papeles de héroes de acción históricamente heteronormativos, ahora afronta su penúltimo gran reto: el del lanzamiento de su marca de ropa BDXY. El último siempre estará por llegar. “Ha sido un viaje muy divertido”, afirma relajado.

¿Lo último que te faltaba por hacer era crear una nueva marca de ropa masculina como BDXY?

Está siendo excitante. He estado como un año y medio para crear BDXY, desarrollar la marca y presentar la colección de 12 piezas. No es muy grande, pero hay en ella mucho amor, mucha pasión y mucho detalle. Ha sido un viaje que he disfrutado mucho. Como actor, siempre he estado involucrado en la moda. Voy a desfiles, he sido modelo en revistas, pero siempre me ha fascinado la parte de fabricación, cómo se eligen los colores, las formas… todo lo que tiene que ver con el diseño y la sastrería. No siento que sea tan ajena a mi vida, y por eso quería crear algo que me representara, no solo a mí, sino a todos los que quieran llevar la ropa. Y la recompensa está siendo increíble. Hemos elegido fábricas sostenibles, éticamente creo que es bueno hacerlo así. Y luego duran, son suaves, conservan el color. Y si las cuidas, son prendas que vas a poder llevar durante años.

Veo que has estado íntegramente involucrado en el proyecto.

Desde el inicio. Creé el proyecto, buscamos el nombre, diseñamos las prendas, buscamos la fábrica, he estado en todo junto a mi pareja, Fran, y mi amigo Christopher, que es estilista y director creativo. Hemos sido una fuerza muy unida en la sombra desde el primer momento. Es bueno ser el dueño, porque eso significa tener el total control creativo, y lanzarlo cuando nos apetece. Todo ha sido exactamente como quería que fuese. Y eso era muy importante para nosotros.

Y habéis estado grabando en Ibiza.

Sí, tengo una casa allí, y creía que la colección y los colores casaban perfectamente con la isla. El lugar perfecto para grabar era Ses Salines. Hicimos un día allí, y luego otro en el barco de un amigo. La isla es mi hogar, y me encanta. Me gusta cómo me hace sentir cuando me bajo del avión y voy conduciendo por la costa. Respiro profundo y puedo oír los pájaros, el viento en el bosque, la playa está bajando la calle… Es una sensación tan buena y especial...

Siempre fuiste una persona inquieta que necesita tener algo nuevo, un reto entre manos.

Siempre. Estoy ocupado, y me gusta trabajar. Y disfruto con lo que hago. Y hago muchas cosas [risas], pero todas me encantan. Crear esta marca es solo una de las muchas experiencias bonitas que me dan la oportunidad de crear algo de la nada. Ha sido un reto, pero lo hemos disfrutado. Y es excitante porque ahora puedes ver la ropa, llevarla y pasarlo tan bien como nosotros haciéndola.

GAJES DEL OFICIO

¿Crees que es la versatilidad, también como actor, lo mejor de tu profesión?

Es la mejor parte, sin duda. Cuando eres actor ningún día es como el anterior. Nunca nada es igual. Cada día tiene retos diferentes, cada personaje tiene diferente acento, personalidad, background, futuro… y físico. Hay tantos factores que hacen que mi trabajo sea apasionante... Y eso es lo que me enamora. Nunca me aburro, jamás.

Algunos papeles también te han exigido físicamente tener que entrenar mucho. ¿Cómo lo llevas?

Bien, por supuesto. Aunque según te vas haciendo mayor, cada vez es más duro, eso seguro. No es tan fácil como cuando tenía 30 años. Ahora tengo 45, y cuesta más. Pero lo vivo como un reto, y como parte de mi cometido. Mantenerme en forma es bueno también para el alma, la mente. No es nada fácil, sufro, pero lo acepto. Me hace sentir bien, y espero que sea así durante mucho tiempo.

¿El debate sobre ser abiertamente gay e interpretar papeles heteronormativos se ha quedado ya antiguo?

Como actor, tu sexualidad no tiene que ser importante, nada que ver con tu papel. No tiene sentido. No preguntan a Bradley Cooper si es gay para hacer Maestro. Es heterosexual. ¿Por qué actores gais no pueden tener papeles heteros o viceversa? No creo que deba importar. El hecho de que sigamos hablando de ello supone que sigue habiendo un problema. Y aunque hemos mejorado, pero como hombre gay, fuera del armario la mayor parte de mi vida, he tenido suerte de superar ese posible obstáculo para hacer todo tipo de papeles, también héroes machotes de acción, escenas de lucha, carreras de coches… Y qué importa quién eres: tu talento no está conectado con tu sexualidad, es ridículo.

Otro debate. Como actor británico, ¿te sigue haciendo ilusión hacer de James Bond?

En verdad nunca ha estado entre mis deseos. Nunca pensé ni siquiera que iba a estar en las apuestas. Sé que lo estoy y es maravilloso. Creo que sea quien sea el próximo Bond, ha sido muy divertido estar en la terna de candidatos durante casi diez años. Es un honor. Hay cientos de actores que podrían hacerlo, y estar en ese grupo, que hablen de ti para ello es fantástico. Ya solo que me consideren es mucho.

¿Y cómo es trabajar en la saga Fast & Furious con músculos como los de Dwayne Johnson?

Increíble. Creo que Dwayne comía unas 17 veces al día. Parábamos una escena a las tres de la tarde y se ponía a entrenar. Hacíamos lo mismo a las cuatro y media, y otra vez. El tipo es una máquina y está muy comprometido con mantenerse en la forma en la que está. No es fácil, pero tiene un equipo con el que viaja y entrena. Se levanta a las cuatro de la mañana y se pone a ello… Y ver cómo lo hacía cuando coincidí con él en Fast 6 era como, guau, este tipo lo deja todo para estar así, y es mayor que yo… Me quito el sombrero con él, siento completa admiración por su trabajo y por su ética.

ACEPTANDO SU CUERPO

Han pasado diez años de aquello. Ahora tienes 45... Confiesa el secreto para estar más fuerte que nunca.

Estoy en buena forma. Siempre puedes estar mejor, nunca vas a estar perfecto. Pero no se trata de eso, sino de intentarlo. Ir al gimnasio, comer saludable, vivir este tipo de vida, y no es fácil. Todos cometemos errores: me encantan los kebabs con patatas fritas, y no voy a dejar de comerlos. Simplemente me hago cargo de no hacerlo cada día. E intento no castigarme por ello. Como todo el mundo, según vas haciéndote mayor, ves que tu cara se arruga un poco, te puede salir un poco de michelín, y pasas por épocas a lo largo de los años. A veces te sientes mejor contigo mismo, a veces no, pero la mejor salud que se puede tener es la mental: si estás fuerte ahí y estás cómodo con cómo te sientes, produce un impacto positivo sobre el resto de aspectos de tu vida. Salud es cómo estás por fuera, pero sobre todo cómo estás por dentro, aquí arriba [se señala la cabeza]. Y es algo que te hace sufrir y contra lo que hay que luchar. Mira las redes sociales: todo el mundo es perfecto, con su vida, su cuerpo… Y no soy eso. Me tengo que recordar a mí mismo que solo se trata de hacerlo lo mejor que puedo. Y a veces lo mejor es solo un poco mejor que la vez anterior, pero eso es la vida real.

¿Y cómo te sientes con tu cuerpo?

Me siento bien. Creo que podría estar mejor. Me miro en el espejo y a veces pienso que podría entrenar mejor, que podría beber menos cerveza, pero la vida no es sencilla. El trabajo, los viajes, las cenas… Faltas un día al gimnasio porque tienes que hacer otras cosas pronto, estás cansado cuando acabas y ya no vas: es el día a día. Y al final solo intento encajarlo y llevarlo bien. Pero, vamos, que me siento bien, veo las fotos de hoy y estoy feliz. Con 45, ya soy de mediana edad, así es como lo llaman, ¿no? Es terrorífico darse cuenta. A veces me tengo que esforzar más de la cuenta para seguir en forma, pero es que cada año que pasa es más duro ser disciplinado y estar en forma.

EN FORMA A LOS 45

¿Eres capaz de organizarte para ir al gimnasio y comer bien?

Lo primero, siempre tomo una bebida energética antes de ir al gimnasio para elevar mi temperatura corporal. Y ayuda. Pero sufro para estar en el gimnasio más de una hora. Cuando llevo 45 minutos, ya estoy mirando al reloj. No importa lo buena que haya sido: una hora es más que suficiente para mí, y me tengo que esforzar para cumplirla. Dejo el teléfono en la taquilla y me concentro en el trabajo para hacerlo. Y cuanto más entreno durante la semana, menos músculos tengo que agrupar. Si me pierdo un par de sesiones, luego tengo que hacer más cosas en menos días, y es todavía peor en una hora. A ver, el gimnasio es bueno para muchas cosas: liberas endorfinas, y sientes que has hecho algo bueno para ti. Soy de entrenar por las mañanas: después de comer ya me cuesta un mundo, lo odio. Y por la noche, aunque a veces tengo que hacerlo, no puedo. Prefiero levantar - me, tomarme un café, ir al gym a entrenar, y listo. Tomo batidos de proteínas, rebajo los hidratos para estar delgado, no me gusta el cardio y por eso vigilo mi dieta. Intento no beber demasiado vino y cervezas, comida saludable, y que todo eso se compense para no hacer mucho cardio. Y entreno 4 o 5 días a la semana.

¿Ayuno intermitente?

He hecho ayunos muchas veces. Cuando lo hice por primera vez encontré que era muy duro. Estar sin comer 14 horas… Y me rendí antes de llegar a las 16. Pero ahora justo acabo de terminar una obra de teatro en Londres. He estado allí todas las noches durante tres meses y medio, y he estado cenando muy tarde, salía hambriento después del show, como a las 11 de la noche. Eso sí, luego era capaz de no volver a comer hasta el día siguiente hasta las 4. No desayuno, solo un expreso doble, voy a entrenar… Y de repente estaba ayunando sin darme cuenta. Y mi cuerpo no necesitaba más energía, lo que es muy interesante. Yo sé que vosotros en España cenáis tardísimo, y me estoy acostumbrando a ello, pero no es fácil siendo de Gales. De todas maneras, el ayuno es fenomenal. Y solo como cuando tengo hambre, no porque tenga que hacerlo. Si mi cuerpo no me lo pide, no como nada.

Por cierto, ¿cómo fue volver al teatro y sentir el calor del público?

Han sido 15 años sin estar encima del escenario, así que ha sido una experiencia increíble. Terminé en enero. Hacer teatro es especialmente difícil, con función ocho veces a la semana, y durante tres horas das toda la energía que tienes, pero la recompensa no se puede comparar con nada. Actuar con público es algo que echo de menos cuando estoy grabando una película. No hay reacciones, es una performance mucho más interna. Pero ha sido muy divertido, muy agradable estar de vuelta.

SU QUERIDA ESPAÑA

Tienes una relación muy especial con España. ¿Qué te ha enamorado de nosotros?

Es que los españoles me recordáis mucho a los galeses. Somos muy abiertos, nos interesamos por los demás, establecemos contacto visual, somos curiosos… Y los españoles que he conocido son exactamente así. Me encanta estar en Madrid porque andas por la calle y todo el mundo te mira. Todos, niños y señoras mayores… En Londres nadie lo hace, es como estar solo entre millones de personas, y es una cosa muy rara. No sé por qué, pero me gusta que la gente se interese por ti de forma natural, que miren tu ropa, zapatos, tu reloj, tus ojos, y luego pasan, y no los vuelves a ver jamás. Y eso me en - canta. Además, amo la comida. Madrid es una de mis ciudades favoritas en el mundo. Vale me rindo, la mejor en la que he estado junto con Londres. Vivimos en Malasaña, en un sitio donde sales y tienes cafeterías, bares, y aunque haga frío todo el mundo está fuera tomando una caña, pequeñas tapas, me hace feliz. Los españoles tenéis la forma de vida correcta.

¿Una comida favorita?

Las almejas, me encantan las almejas. Almejas, con perejil, mantequilla, ajo, eso es todo, perfecto [dice en un español más que aceptable].

2024-05-09T06:50:50Z dg43tfdfdgfd