IRRECONOCIBLE: ASí ESTá AHORA PAUL HOGAN, PROTAGONISTA DE ‘COCODRILO DUNDEE’
Paul Hogan fue una de las grandes estrellas de Hollywood en los 80 y 90 gracias al éxito de la saga 'Cocodrilo Dundee'. Esas películas dieron fama al actor australiano y lanzaron su carrera como intérprete a lo más alto.
La trilogía del cazador de cocodrilos le hizo ganar un Globo de Oro en 1987 por su papel como Michael J. 'Cocodrilo' Dundee y le consiguió varias nominaciones a otros grandes premios cinematográficos. La última película de la conocida saga se estrenó en 2001 y, desde entonces, ha participado en solo cuatro producciones más pequeñas.
Cuatro décadas después, el actor ha sufrido un gran cambio físico. Ahora tiene 84 años y sufre de graves problemas de salud que le obligaron, hace unos años, a dejar el mundo de la interpretación.
Problemas de salud
Paul Hogan vive en la actualidad en Los Ángeles (California, EEUU) con su hijo Chance, de 24 años. El actor australiano está recibiendo un tratamiento para superar la enfermedad renal que padece, y que lo ha dejado muy débil.
Hogan ha confesado en una reciente entrevista para 'Men's Health' que no está en su mejor momento. Su estado de salud está muy perjudicado, tanto que apenas puede hacer tareas cotidianas: "He estado bastante mejor que ahora... Tuve un problema en la aorta del riñón y el tratamiento lo arregló al principio, pero he sufrido una recaída. He perdido toda mi grasa corporal y todos los músculos, estoy casi sin fuerzas y me noto muy débil. Ni siquiera puedo abrir un frasco ya".
El aspecto del actor dista mucho de los músculos que lucía en sus películas, allá por los años 80. En unas imágenes publicadas por el diario británico 'Daily Mail' se puede ver que el paso del tiempo y su mencionada enfermedad han dejado al australiano con un rostro mucho más envejecido, y muy débil.
"Una persona mantenida por una máquina"
Paul Hogan también cuenta con un marcapasos en el corazón, hecho por el que se define como "una persona mantenida por una máquina".
"Con 70 años todavía estaba bien, casi como cuando tenía 40. Pero llegado a los 80 todo empezó a torcerse y desmoronarse", explicaba el australiano en la entrevista.
El actor está muy bajo de peso a causa de la dieta que tiene que llevar y, por si fuera poco, los medicamentos que tiene que tomar le impiden poder coger algo de peso. "Con esta medicación, te encogen los músculos y estoy tan delgado que tengo frío a todas horas", añadía.