ASí FUE EL PRIMER CONCIERTO EN EL NUEVO BERNABéU: SE NOTó LA CUBIERTA... Y EL ESTADIO CANTó EL «CóMO NO TE VOY A QUERER» CON CAMELA
Mientras el Real Madrid certificaba la Liga en San Sebastián con la actuación de Arda Güler, el Nuevo Bernabéu también estaba de función. Se pusieron los cuernos. Bellingham, Vinicius y compañía le dejaron su sitio al público, que se movilizó a Chamartín para asistir al primer concierto en el estadio tras las faraónicas obras.
El evento 'Locos por la música' inauguró la temporada sin fin de conciertos en el Nuevo Bernabéu. Un festival que ofreció siete horas de música de la mano de varios artistas nacionales como Camela, Juan Magán, Seguridad Social o Modestia Aparte. Y fue todo un éxito, como teloneros de Taylor Swift o Karol G para el verano.
En cuanto a las preguntas técnicas: la cubierta se cerró y no se puso en funcionamiento el videomarcador. Todos los asistentes consultados por Relevo coincidían: «Se notaba lo del techo cerrado, por el sonido y también por el tiempo, que hacía menos fresco que en la calle», comentaban.
Otros aficionados merengues como Ignacio, que no asistió al evento, se confesaban antes del concierto: «Yo me esperaba algo más grandioso para estrenar este tipo de cosas. Qué sé yo. Los Rolling Stones». Pero el Nuevo Bernabéu se fue animando, con gente entrando por sus puertas religiosamente desde las cinco de la tarde.
Las entradas costaban alrededor de 40€, y los asistentes lo disfrutaron. Un total que rozó las treinta mil personas de público, que se fueron alternando hasta las doce de la noche, hora a la que terminó el festival. La gente de mediana edad, la más vista entre canción y canción.
El momento cumbre, coinciden los más merengues que acudieron al espectáculo, cuando Camela sorprendió a todos y entonó el «Cómo no te voy a querer» sobre el escenario. Todo el estadio acompañó al mítico grupo español para cantar el famoso himno blanco, recordando las Copas de Europa del Real Madrid. «Aquí todos son vikingos», decían algunos.
Antes, la actuación de DJ Nano, con la camiseta del Real Madrid puesta y el dorsal número 44. La gente vibró con sus ritmos, y también con los temas de Modestia Aparte. El Nuevo Bernabéu estuvo bien representado de blanco. Y se cuidó. «Está muy bien organizado. Hay un montón de gente para indicar el sitio, seguridad, staff…», contaba Maribel.
El fin de fiesta coincidió con el pitido final en Anoeta. El equipo de Carlo Ancelotti sumó tres nuevos puntos y el estadio del equipo blanco vibraba abarrotado con la actuación de Juan Magán. El artista catalán fue el último en despedir el primer concierto del Nuevo Bernabéu, con un gran espectáculo de luces. Una noche redonda para el Real Madrid.
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